El presidente Andrés Manuel López Obrador envió a la Cámara de Diputados una iniciativa preferente para reformar la Ley de la Industria Eléctrica a favor de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que implica, entre otras medidas, “revisar la legalidad y rentabilidad de los contratos de generación y compraventa de energía eléctrica” signados entre el gobierno federal y particulares.
La iniciativa, recibida ya en San Lázaro y que será analizada y votada en las próximas sesiones camerales que inician este miércoles 3 de febrero, destaca en su exposición de motivos que el gobierno de Enrique Peña Nieto le dio “cobertura legal” a la llamada reforma energética a base de “sobornos entregados a legisladores mediante el engaño mediático a la población”, que se tradujo “en negocios lucrativos para empresas particulares y políticos corruptos, transitando al apoderamiento privado del mercado eléctrico”.
Ante ello, se explica en el documento firmado por López Obrador, la CFE “quedó fracturada, casi en ruinas, endeudada, obligada a otorgar toda clase de subsidios a sus supuestos competidores, por tanto, con capacidad productiva disminuida y sometida a una regulación que privilegia a los particulares”.