Momentos de terror vivieron dos elementos de la Guardia Nacional división caminos luego de ser interceptados por un comando armado cuando viajaban sobre la carretera 57 la noche del domingo, al terminar su turno laboral.
Los elementos identificados como William de 35 años y Héctor de 28 fueron emboscados por varias camionetas de las que descendieron sujetos fuertemente armados que los obligaron a descender de su vehículo y abordar sus unidades.
Ya dentro de las camionetas los uniformados fueron esposados y vendados de los ojos hasta que llegaron a una casa de seguridad donde también los amarraron de los pies para comenzar con diversos métodos de tortura durante dos días.
William narró a las autoridades que los obligaron a estar hincados las más de 48 horas, y se negaban a proporcionarles agua o alimento, mientras que los tableaban, e incluso les quemaban los pies para que confesaran si laboraban para alguna célula delictiva.
Este miércoles por la madrugada fueron liberados en una brecha de la carretera, y caminaron por varios kilómetros hasta que pidieron ayuda siendo trasladados por una ambulancia de San Roberto a las instalaciones del Hospital Muguerza donde fueron diagnosticados con trauma de craneo, quemaduras de primer grado, entre otros
