Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- El mandato del presidente Enrique Peña Nieto ha estado repleto de escándalos. Los mayores han sido protagonizados por personas de su círculo más cercano, como su propia esposa y sus secretarios de estado. Ahora sale a la luz pública que la constructora Kouro Desarrollos, donde participan como socios dos de los hijos, un yerno y un sobrino del ex procurador Jesús Murillo Karam (ahora titular de Sedatu), multiplicó sus contratos siete veces con fondos federales, en obras públicas durante el actual sexenio. La información es de La Silla Rota.

La constructora Alvarga, tuvo ocho veces más contratos, mientras que Itrio Arquitectos, propiedad de una sobrina de Murillo, logró incrementar por cinco el monto de obras adjudicadas.

Durante los últimos tres años del Gobierno de Felipe Calderón (2010-2012), las tres constructoras ubicadas en Pachuca recibieron en conjunto contratos de obra con fondos federales por 634 millones de pesos.

Con el retorno del PRI a la presidencia, las adjudicaciones que obtuvieron en los tres millones de años del sexenio de Enrique Peña Nieto superaron los 4 mil 400 millones de pesos.

Entre las obras asignadas están las construcción del rompeolas en la Isla del Carmen, la ampliación del malecón turístico de Manzanillo y en León un distribuidor vial.

En  los primeros años del sexenio actual, Kouro Desarrollos recibió contratos por mil 402 millones de pesos, en los que se incluye la segunda etapa del Distribuidor Vial Benito Juárez, que abandonaron a la mitad y el puente vehicular Antonio Madrazo, que fue entregado con fallas, los dos proyectos sobre el Boulevard Morelos, de Nuevo León.

Jesús Murillo Ortega, Gerardo Saade Kuri y Carlos Castañeda Murillo, hijo, yerno y sobrino del ex Procurador, su otra hija, Sandra Georgette Murillo Ortega, es la accionista mayoritaria de la constructora  Kouro.

Multimillonarios contratos

Alvarga Constructora elevó sus contratos a mil 876 millones en el periodo 2013-2015, mientras Itrio Arquitectos aumentó sus contratos de 222 millones a mil 203 millones de un sexenio a otro.

Gerardo Roqueñí Murillo, otro de los sobrinos del ex procurador, actualmente es socio de Grupo Roqueñí  y Soluciones Globales, constructoras que han obtenido en este sexenio 80 millones de pesos en contratos sin licitar del IMSS y de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.

La Secretaria de Comunicaciones y Transportes (SCT), encabezada por Gerardo Ruiz Esparza, asignó a las constructoras de la familia Murillo más de 2 mil 300 millones de pesos entre el 2013 y 2015, en obras carreteras y puertarias.

Cuando la SCT otorgó los primeros contraltos a Kouro, la constructora tenía su domicilio fiscal en la calle de Veta Arras 111, Colonia Real de Minas, en Pachuca Hidalgo, hasta hace dos meses en el domicilio había una casa pequeña de un piso.

Ante Compranet, Kuro registró la dirección de Retorno de Bacalar 145, Fraccionamiento Rincones del Paraíso, en Municipio hidalguense de Mineral de la Reforma, en esta segunda dirección hay una casa deshabitada.

Habla Murillo

Tras conocerse estos datos, Jesús Murillo Karam rechazó que durante el tiempo que permaneció al frente de la PGR haya beneficiado a su familia para obtener contratos con diversos gobiernos estatales.

“Nunca he utilizado los diversos encargos públicos que se me han conferido, para beneficiar a persona alguna”, señaló el también ex gobernador de Hidalgo en una carta enviada al diario Reforma.

Murillo Karam señaló que su hijo es empresario desde antes de que él asumiera el cargo de titular de la PGR y celebró contratos con diversas entidades desde antes de su gestión como Procurador e, incluso, en administraciones anteriores.

“Debo precisar que mi familia es conformada por más de setenta integrantes de manera directa, dentro de los cuales algunos son contratistas y constructores, sin que yo tenga algún vínculo con sus actividades”, afirmó Murillo Karam.

“Cualquier señalamiento respecto de mi persona, mi familia o mi honorabilidad, está totalmente fuera de lugar y lo rechazo de manera categórica”, agregó.