Durante la temporada de vacaciones, los accidentes tienden a incrementarse hasta en un 20 por ciento tanto en carretera como el hogar, por lo que la Secretaría de Salud a través del programa de Prevención de Accidentes hace un llamado a la población para tomar las precauciones debidas con el objetivo de evitarlos, informó el Dr. Gerardo Rebolledo Sánchez, titular del programa.
El funcionario destacó, que el 90 por ciento de los accidentes pueden ser prevenibles si se toman las precauciones debidas, además de señalar que pueden evitarse discapacidades si la persona accidentada recibe atención médica adecuada en los primeros minutos.
El Dr. Gerardo Rebolledo Sánchez mencionó que el uso del cinturón de seguridad por parte de los ocupantes del vehículo, reduce el 50 por ciento la posibilidad de sufrir lesiones severas en caso de accidente, el uso de las sillas porta infante y el uso de los cascos protectores para motociclistas ha demostrado que reduce hasta en un 70 por ciento las lesiones.
El coordinador de Prevención de Accidentes, recomienda a aquellas personas que van a salir de la ciudad en su vehículo durante esta temporada, revisar su unidad y evitar conducir cansado o bajo los efectos del alcohol o drogas y respetar los señalamientos de circulación en la ciudad o carretera.
En lo referente a accidentes en el hogar, el funcionario hace la recomendación de asegurarse de estar atentos de las actividades que realizan los niños dentro y fuera de casa y no dejar a su alcance sustancias químicas, objetos punzo cortantes, medicinas, armas, cerrillos y todo aquello que pueda ocasionar algún accidente.
Rebolledo Sánchez señaló que es importante también prevenir quemaduras derivado del contacto con líquidos calientes, por lo que es recomendable utilizar los quemadores posteriores de las parrillas, así como también poner atención en el traslado de los líquidos, procurando evitar que los niños se encuentren cercanos por los sitios donde se vaya a pasar.
Finalmente exhorto a la población a hacer un buen uso del número 066 en caso de presentar alguna emergencia, con el objetivo de evitar llamadas de broma.