THE WASHINGTON POST:
CIUDAD DE MÉXICO (Apro).- México dejó de ser puente de tránsito de la droga hacia Estados Unidos, para convertirse en uno de los principales países consumidores, según confirma el influyente diario estadounidense The Washington Post.
En el texto titulado “El narcotráfico en México golpea su propio hogar”, el rotativo resalta que “si bien las tasas de consumo de drogas siguen siendo muy inferiores a las de Estados Unidos, el porcentaje de hombres mexicanos entre 12 y 65 años que consumieron drogas ilegales casi se duplicó en la última década (hasta el 15.8%) mientras que el porcentaje de mujeres aumentó más del doble (4.3%)”.
Con datos del Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic), el reportaje subraya que ahora los funcionarios mexicanos deben tener en cuenta el creciente consumo de heroína en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez; cocaína circulando en la escena playera de Acapulco; y adictos a la metanfetamina llenando centros de rehabilitación en el oeste del estado de Jalisco.
“Se produce en México, eso es un problema, y lo exportamos, pero cada año se quedan más personas aquí, y la gente comienza a consumirlo”, confirmó al diario estadunidense el propio titular del Conadic, Manuel Mondragón y Kalb.
El funcionario añadió que a pesar de “no tener un boom de consumo, en algunos estados sí tenemos un problema”.
TRIPLICA PRODUCCIÓN
Según la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos, fue entre 2013 y 2016, cuando impulsado por “el voraz apetito” de los estadounidenses, México triplicó la producción. Además, a medida que las autoridades de Estados Unidos tomaron medidas enérgicas contra los laboratorios de metanfetamina de ese país, la producción se trasladó a México.
El Washington Post señala que tras las medidas de seguridad que el gobierno estadounidense impuso luego del atentado del 9/11, las drogas se han agrupado del lado mexicano.
“Los cárteles han inundado la frontera “con enormes cantidades de metanfetamina que no pueden cruzarse a Estados Unidos, por lo que tan rápido como llegan, los distribuidores de nivel medio y bajo lo expulsan a los mercados locales”, señaló un funcionario de la fuerza pública estadunidense, en anonimato, con WP.