Esta media docena de medidas es la siguiente: acelerar los procesos de devolución de impuestos en particular del IVA; suspender temporalmente los pagos provisionales del Impuesto Sobre la Renta, ya sea el propio y el retenido por los sueldos, sobre todo en el sector aéreo, turismo, logística y transporte; suspensión temporal de actos de fiscalización; establecimiento urgente de estímulos fiscales temporales al empleo e inversión; Suspensión temporal del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a gasolinas y diésel.
Así como: mejorar la disponibilidad de la financiación y acceso a créditos por parte de instituciones como Nacional Financiera (Nafinsa) o el Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext).
El Sindicato Patronal afirmó que “ante la insuficiente inyección de liquidez por parte del Gobierno Federal para dar respuesta al coronavirus Covid-19 -que va a desacelerar aún más la economía mundial y mexicana-, la administración encabezada por Andrés Manuel López Obrador debe otorgar mayores estímulos fiscales para aminorar y contener el impacto negativo que pueda ocasionar la emergencia sanitaria a las finanzas nacionales”.
La Confederación afirmó que por la experiencia de la influenza AH1N1, las industrias restaurantera, turística y de entretenimiento pueden verse sumamente afectadas, lo que dependerá de las medidas de prevención que se establezcan.
Además está claro que la pandemia provocará caída de la actividad productiva, lo que afectará más a las pequeñas y medianas empresas, pues enfrentarán un problema de liquidez en su flujo de caja.
Tras la experiencia de México en el manejo de la epidemia de influenza AH1N1 se tiene muy claro que empresas de las industrias restaurantera, turística y de entretenimiento pueden verse sumamente afectadas, dependiendo de las medidas de prevención que se establezcan.