EL TRAPICHE
Por el Lic. Luis Fernando Leal Beltrán
“FEMINICIDIO”
La muerte violenta de las mujeres por razones de género, crimen de odio que está tipificado en nuestro sistema penal como feminicidio, es la forma más extrema de violencia contra la mujer, que entraña y una de las manifestaciones más graves de odio rencor coraje contra quien físicam
ente por complexión es más débil, siendo además una de las formas de la discriminación hacia ellas, es tan difícil y doloroso hablar de este tema que agravia de una forma tan fuerte a la sociedad en general que llegar a descifrar con palabras este delito como tal y la conducta desplegada en esta delito por el agresor resulta muy complejo , en la actualidad aun el pleno 2020, los casos de feminicidio en nuestro estado se cuentan por cientos, ya que no hay semana que no nos enteremos por los medio de comunicación de al menos un feminicidio en la entidad en donde desde hace ya más de un año nos encontramos en
ALERTA DE GÉNERO
la cual se debería o por lo que están obligadas las instituciones oficiales por principio de cuenta a mantener en forma constante activos los protocolos de protección a la mujer ante cualquier sospecha por mínima por la que sea de actos, acciones o omisiones que vulneren la seguridad y libertad de las mujeres sea cual sea su estatus socio económico, más sin embrago aunque esto es sabido por las instancias de gobierno implicadas en el tema en la realidad, estamos bajo una displicente forma de gobernar que de lo que menos se ha preocupado es precisamente de establecer un protocolo que prevea el actuar en tiempo y forma bajo cualquier alerta, con la que la coordinación institucional y los poderes del estado y que lleguen a una real y asertiva intervención con el objeto de detener a tiempo la amenaza y por tanto detener la realización del delito, eso es una real protección a las mujeres
Lamentablemente existe una lamentable falta de preparación del personal institucional, como una falta de la infraestructura en cada institución involucrada con el objeto que sea posible el tratamiento institucional de estos asuntos y por contrario se limitan a tener algunos formatos alguna oficina con una o dos personas que a lo más que llegan es a realizar cuestionarios a la víctima o entrevistas que no atiende a en caminar una solución real y menos a activar una protección efectiva, como ejemplo viviente en la zona media en el Ejido San Marcos de Rioverde casi al finalizar el año el ex juez familiar levanto las medidas de protección de una fémina que se le habían concedido respeto de varias amenazas de su ex pareja levantamiento indebido de medidas, que no fue el único del que tuvimos conocimiento, pero lamentablemente en el caso de la señora unos días después de ello LA MATARON y ya entonces de abrió una flamante carpeta de investigación por feminicidio y el juez quien también debía de ser responsable simplemente por el indebido levantamiento de las medidas protectoras simplemente lo cambiaron de adscripción y nada dijo la autoridad ni judicial ni administrativa sobre su responsabilidad que a mi forma de ver la omisión y falta de racionalidad del acuerdo de levantamiento de las medidas de protección y las consecuencias fatales que ya referí debió culminar cuando menos en su destitución, más por el contrario pararon como por arte de magia todos los comentarios públicos y en redes en la prensa simplemente se callaron, los colectivos brollaron por su ausencia en los reclamos de justicia y el juez solo fue cambiado de adscripción sin pena alguna, he aquí una doble victimización de la persona fallecida he aquí una falla del sistema judicial del estado en doble responsabilidad y del poder ejecutivo, de los protocolos, de las instituciones encargadas de proteger a las víctimas de la administración publica en lo general que no logro o no tuvo la capacidad de proveer en tiempo y hacer prevalecer las medidas que aun estas son mínimas pero por lo menos el dictado de ellas sirve en algunos casos como simple disuasivo para quien comete estos delitos, he aquí el ejemplo de la falta de políticas públicas de estado ajustadas a la necesidad real de las victimas los estatus sociales y económicos de las mismas a quienes deberán atender sin distinción de su nivel socio económico y de forma esmerada, puntual con estrategias que sean atinadas a resolver el problema lo mas de fondo posible por el contrario encontramos que lo que prevalece es solo impunidad y una muy cantada ausencia de recursos en todas las instituciones involucradas con el tema, ya que la falta de atención a estas flagelantes conductas nos lleva a señalar a una cadena de omisiones y responsabilidades desde el poder legislativo encargado de dictar las normas jurídicas a manera de leyes o reglamentos para que atiendan los asuntos relacionados y su omisión tacita y reiterada en que incurren como encargados de aprobar las leyes de ingresos del estado observen también de forma exhaustiva y aprueben la cantidad necesaria de recurso suficientes para que las instituciones operen al menos sin la falta de personal he infraestructura que se necesitan para la eficacia de la atención correcta y especializada, ya que legislativo además es revisor de los gastos del mismo ejecutivo y sus instituciones que a decirlo en verdad suplente no opera no observa correctamente ni menos tiene interese en que existan el presupuesto suficiente y se aplique debidamente en este rubro de ahí que la falla institucional en la falta de una política pública correcta que atienda desde el origen, es de quien hace la norma es decir a quien también le asiste una responsabilidad activa, el poder legislativo del estado y no es propia esta falla del actual legislatura es una falla ya histórica y arraigada que su origen no es otro sino la falta de interese y compromiso social de los legisladores quienes además ignoran muchas de la necesidades sociales sino que además prefieren no encabezar estos reclamos muy comúnmente realizados por los colectivos feministas de ahí es que no podemos dejar de pasar en este tema la
DISCRIMINACIÓN DE LAS VICTIMAS
Esto es aún más complejo ya que la falta de atención como ya lo dijimos se acentúa más en las dependencias municipales y en las comunidades donde más existe la ausencia de los recursos y el establecimiento de los protocolos correctos y la especialización de personas para actuar de forma especializada en él y momento correcto, aunado a la falta de atención de la misma sociedad que la violencia intrafamiliar y de género en muchos casos ya forma parte de su día a día y quizás hasta de sus usos y costumbres muy lamentable esto ya que la sociedad tiene en sus manos el cambiar la visión de los gobiernos, es muy lamentablemente que nuestros libros de texto no abarquen el tema del respeto y la autovaloración de las mujeres, el respeto a cada uno de los miembros de las familias la igualdad de todos y cada uno de ellos en rol familiar y luego de ello en su rol social, la omisión triste de todos en general quienes no hemos sido capaces de intervenir y defender a una mujer que muchas veces es ofendida y maltratada ante nuestros ojos, o escuchar gritos y maltratos en nuestro vecindario y actuar si no la intervención al menos la denuncia anónima hoy por hoy ante la decadencia social debemos actuar ser más perceptivos y mas sensibles a los focos de alarma que se prendan al observar conductas inapropiadas o violentas con menores y mujeres debemos intervenir o denunciar bajo esta perspectiva quienes somos omisos antes estos simples actos si se llegan a cometer o consumar actos subsecuentes que sean extremos somos en una gran parte responsables por nuestra propia irresponsabilidad al no denunciar este tipo de hechos, la autoridad tiene mucho por hacer y debemos exigir que lo haga pero nosotros como sociedad tenemos también una gran responsabilidad y una muy importante parte para llegar a la solución de este flagelo social hagamos un cambio de perspectiva y acción real todos, en nombre de nuestras hijas madres y hermanas cualquiera de ellas que pudiera necesitar que alguien consiente de la sociedad le apoye le respalde y le cuide en cualquier lugar del mundo para que no llegue a ser una parte de una triste historia y una estadística.
Dedicado a las que ya no están y esperan justicia una oración por ellas
