A la gente mayor le afecta más estar confinado en su casa o residencia para prevenir contagios de Covid-19, ya que al aislarse sin salir o recibir visitas puede empezar a sufrir ansiedad y nostalgia.
Esa es la visión del neuropsicólogo, Mario Enrique Reyes Vázquez, especialista en adultos mayores de la casa de reposo Eishel Nuestro Hogar, quien agrega que el problema “puede desembocar en depresión y en ansiedad”.
SOLEDAD, MALA COMPAÑERA
La crisis de salud hizo que se pidiera a las familias reducir las visitas a los viejos y eso agravó el distanciamiento que ya existía antes de la pandemia.
El experto médico explica que “en condiciones normales, sólo entre 20 y 30% de los residentes tienen contacto de manera constante y de calidad con su familia”.
Los niños pueden padecer sentimientos de abandono, “especialmente si tenían una relación constante y emocionalmente fuerte con el adulto mayor”, asegura Patricia de la Fuente, directora de Servicios Educativos para el Desarrollo Infantil.
Para un niño, su abuelo o abuela, representa una figura clave amorosa, educativa, responsable y genera en el menor seguridad y confianza, explica.