“Es a todas luces un linchamiento político y penal orquestado desde el gobierno”,afirmó el gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, en un mensaje que emitió tras la aprobación del desafuero por parte de la Cámara de Diputados.
A través de un video, García Cabeza de Vaca dijo que en estos momentos, “la ley en México vive días oscuros y no parece haber más justicia que la revancha de unos cuantos”.
Aseguró que su sentido de la dignidad, y la defensa de la libre voluntad de las ciudadanas y ciudadanos de Tamaulipas, no le permite someterse a dicha patraña, “se qué mi suerte se decidió hace tiempo; mucho antes de que se me acusara, justo desde el momento en que alcé la voz para defender los intereses de las y de los tamaulipecos”, agregó.
García Cabeza de Vaca dijo que el odio al adversario, al diferente, se ha convertido en poítica pública y no hay quien se salve de la palabra insidiosa, de la abierta amenaza, del uso de las instituciones públicas para ser calumniado, castigado, señalado y hasta encarcelado.
“Particularmente, quienes hemos sido oposición al actual presidente desde hace años, una oposición apegada a la ley, a las instituciones, las reglas democráticas, somos ahora foco de la embestida gubernamental, porque este desafuero no se trata de vínculos con el crimen organizado como falsamente se ha difundido, y tampoco se me acusa de pactar, proteger o dejar huir a un delincuente o a un capo”, agregó.
En una serie de frases, mencionó que no le imputan haberse apropiado de recursos públicos en beneficio propio o de su familia, que no ha sido llamado a cuentas por desobedecer alguna ley o algún mandamiento judicial y que no apareció en algún video agarrando dinero en efectivo.
“Por ningún motivo, me desafueran por enfrentar denuncias de violación a una mujer o por acoso sexual contra menores inocentes. No, de ninguna de estas cosas se me acusa”.
Y añadió: “La mayoría del partido en el gobierno, me quiere desaforar y remover del cargo, por no haber pagado supuestamente, los impuestos de la compraventa de un departamento. Eso es todo. Por absurdo que parezca”.
Relató que a lo largo del procedimiento, en su defensa ha demostrado que esa operación fue lícita; que los impuestos fueron debidamente declarados y pagados; que su patrimonio es producto del esfuerzo personal y familiar de toda una vida, “pero es claro que cuando hay consigna, ninguna prueba o razonamiento jurídico es suficiente para que impere la verdad y la razón, y es que este desafuero, no es una causa de justicia, sino una venganza política“.
Afirmó que sus denunciantes han llegado al extremo de falsificar y manipular pruebas con el propósito de revertir la decisión democrática del pueblo de Tamaulipas.
“Lo que buscan es removerme del cargo a la mala, porque saben que no pueden ganar por la buena. Quieren meterme a la cárcel, porque saben perfectamente que no pueden convencer en las urnas, porque necesitan culpables que justifiquen su ineptitud y su corrupción”, dijo.
Aseguró que la Constitución es clara: la Cámara de Diputados federal no puede desaforar por sí misma a ningún funcionario local, “esa facultad compete en última instancia al Congreso local, por la sencilla razón de que el poder local emana de la soberanía popular, de los estados que integran la Federación”.
Recordó cuando en el entonces Distrito Federal, en los confines de 2005, se defendía el espíritu federal de la República para evitar la consumación de otro perverso desafuero.
“Me permito citar al entonces señalado culpable, Andrés Manuel López Obrador, quien dijo: ‘El dolo y la mala fe es de quien me acusa, de quienes me acusan. Tengo la conciencia tranquila. Desde hace muchos años que lucho por mis ideas y lo hago apegado a principios, uno de estos es precisamente, hablar con la verdad y conducirme con rectitud. Tengo la certeza absoluta de que no se me juzga por violar la ley, sino por mi manera de pensar y actuar, y por lo que pueda representar, junto con otros mexicanos, para el futuro de nuestra patria’”.
Expresó que se acusa desde el poder sin miramientos a todo aquel que disiente, “no importa, si son mamás de niños con cáncer, víctimas de la violencia, madres de desaparecidos, mujeres exigiendo nada más que sus derechos, periodistas, activistas o políticos de otros partidos. Para el régimen, quienes pensamos distinto, somos, simplemente, enemigos del Estado”.
Y agregó: “Mi desafuero es una clara advertencia política para el pluralismo: en este país, sólo hay dos opciones políticas: o estás con el presidente o el presidente está contra ti. En esta exigencia de miedo y sumisión pretenden sentar un precedente que sirva de ejemplo para que el federalismo no sea nunca contrapeso democrático, para que nadie alce la voz y se convierta en una alternativa que pueda sacar adelante a nuestro país”.
Indicó que el autollamado gobierno de la transformación sólo aspira a la “restauración del más rancio autoritarismo”; y que no se puede construir un país como el nuestro, con un discurso de odio y de rencor que se escucha todos los días.
“No es la ley, sino el capricho, lo que definirá mi destino”, afirmó.
Y en la parte final de su mensaje, García Cabeza de Vaca advirtió:
“Ningún intento de desafuero, ninguna sentencia a modo, ninguna condena me podrá quitar la dignidad, ni la honra de seguir sirviendo, hasta el ultimo minuto de mi mandato, al Estado libre y Soberano de Tamaulipas”.