Pachuca, HIDALGO.- El presunto líder de uno de los grupos de ordeñadores de combustible que opera en Tula, Hidalgo, fue ejecutado a tiros, cuando circulaba a bordo de una camioneta.

A inicios del año, el presunto criminal, de 31 años y apodado “El Xhiti”, libró un ataque, pero la suerte no le sonrió la noche del martes, cuando murió al recibir varios disparos, al parecer, de rifle R15, 30 de los cuales perforaron el vehículo en el que circulaba, en la comunidad de La Loma, en el municipio de Tepetitlán.

El comisario estatal de seguridad, Uriel de Jesús Moreno, confirmó a Excélsior que los hechos habrían estado relacionados con disputas entre grupos por el control del tráfico de combustible en la región.

Indudablemente, es relacionado al mismo evento”, dijo y añadió que, en Tula, los grupos compiten “porque alguno se cree más fuerte que otro”.

El mando policial se reservó revelar cuántas células criminales están relacionadas con la ordeña de combustible por tratarse de un delito federal, pero dijo que están identificados sus miembros.

Lamentablemente, dijo, la falta de denuncias y la acreditación de la conducta delictiva de manera técnica y científica que exige el Nuevo Sistema de Justicia Penal (NSJP) complica.

Eso es lo que lamentablemente ha retardado la acción de la justicia, en contra de estas personas”, aseguró.

Aunque la ordeña de combustible en Hidalgo se concentra en Tula, Valle de Tulancingo y el Altiplano, este miércoles fue localizada una fuga proveniente de una toma clandestina en el Durazno, comunidad de San Agustín Tlaxiaca, a 18 kilómetros de Pachuca.

En el acordonamiento y reparación de la zona de la fuga, en la que el combustible salía disparado a más 20 metros de altura, no se reportaron lesionados, ni personas detenidas.

 

Del 5 de septiembre de 2016 a septiembre de 2017, policías estatales recuperaron un millón 6 mil 762 litros de combustible ordeñado y se registraron 16 ataques de ordeñadores en contra de agentes locales.

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