Justo a unos días de las sanciones a Morena, el senador pidió revisar los castigos a candidatos y partidos, así como la proporcionalidad de los mismos.
Justo cuando el Instituto Nacional Electoral (INE) decidió quitarle las candidaturas a las gubernaturas de Guerrero y Michoacán, respectivamente, a Félix Salgado y Raúl Morón, el coordinador de senadores de Morena, Ricardo Monreal, dijo que la renovación de los órganos electorales es inevitable por parte del Congreso, ya que es hora de revisarlos y porque además son los más costosos en el mundo.
“La actualización de los órganos electorales es una obligación inevitable del Poder Legislativo, porque no sólo son los más costosos del mundo, sino también porque se han ido incorporando más y más instituciones por la desconfianza ciudadana, y es hora de darles una revisión”, dijo este sábado durante la presentación de su libro Nulidades y procedimientos sancionadores en materia electoral.
El morenista pidió revisar las sanciones a candidatos y partidos, así como la proporcionalidad de las mismas, para no afectar los derechos políticos, también sugirió analizar a propaganda gubernamental y las campañas en internet.
“Lo único constante es el cambio y nada es más oportuno que la investigación constante y la identificación de aquellas áreas que exigen mejoras al interior de la estructura jurídica nacional e
Monreal consideró que los órganos electorales pueden caer en el abuso al violar el derecho de participación pacífica en elecciones al imponer sanciones desproporcionadas para algunas faltas.
“Hay un abuso de algunos órganos electorales al violar el derecho a participar pacíficamente en procesos democráticos. Es necesaria mayor precisión legislativa para no permitir interpretaciones amplias groseras y violatorias del principio de legalidad, pues no existe en la legislación una relación de lo que debe tomarse en cuenta para fijar la gravedad de las infracciones”, explicó.
El legislador añadió que hay otros temas pendientes sobre los cuales se debe reflexionar en el Congreso como el voto electrónico, la posibilidad de sufragar de las personas privadas de la libertad que no tienen sentencia y la independencia de las autoridades electorales.