En un año, el precio por kilo de goma de opio se duplicó en México. En Estados Unidos, puede alcanzar hasta mil dólares el gramo.
Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- El aumento desenfrenado en el precio del opio debido al auge de la heroína en Estados Unidos está regando de sangre vastos territorios en las montañas y zonas bajas del estado de Guerrero.
Dirigentes campesinos alertaron que en diversas comunidades se intensificó la lucha encarnizada entre las bandas que se disputan la hegemonía en las principales zonas productoras, que empiezan a ser conocidas como “el nuevo Afganistán”.
La banda de los hermanos Angel y Efraín Villalobos, que controlaban la región de la sierra de Guerrero, que registra un “boom” en la producción de goma de opio, fue desplazada hace poco por grupos rivales tras el arresto del primero en marzo pasado.
Ambos hermanos trabajaban para la organización conocida como “Los Rojos”, y después decidieron romper este acuerdo y unirse a su acérrimo enemigo “Guerreros Unidos”, según algunas fuentes, citadas por el sitio web ansalatin.com.
Al menos una decena de muertes y un número similar de heridos dejó sólo a fines del año pasado en comunidades de los municipios de Leonardo Bravo y Heliodoro Castillo la confrontación a muerte entre los grupos rivales.
Actualmente el precio de un kilo de goma de opio se paga a 700 dólares, más del doble del año pasado, lo que ha aumentado el apetito insaciable de ganancias de las bandas del crimen, pero cuando llega a las calles estadounidenses ya transformada en heroína puede alcanzar hasta 50 mil dólares.
Cada bulbo de amapola aporta apenas unas gotas de esta materia prima para elaborar la heroína, de ahí que sea tan apreciada.
Aunque México es el tercer productor mundial de heroína, aporta el 50 por ciento del producto de la demanda en el país vecino por lo que la producción aumenta aceleradamente en Guerrero, que ha desplazado a las montañas del norteño estado de Sinaloa como la principal zona productora de opio.
El último Informe Mundial sobre Drogas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) divulgado el 27 de junio pasado señaló que las plantaciones de amapola aumentaron 24 veces en 16 años en México.
Sólo entre 2014 y 2015 se expandieron en 45 por ciento a causa de la epidemia en Estados Unidos, que día a día cobra más vidas.