- La rosca monumental que se había planeado originalmente fue dividida para entregarla a organizaciones que atienden personas en vulnerabilidad
En un acto de responsabilidad, el programa que se había establecido en el Gobierno de la Capital para llevar a cabo la ceremonia donde se partiría la monumental Rosca de Reyes; mismas que mediría 200 metros, tuvo que modificarse para evitar aglomeraciones y proteger a todas y todos los potosinos de los contagios de covid-19, por lo que el acto simbólico se llevó a cabo de manera virtual.
“Con ello se logró otro efecto muy positivo, la rosca monumental se dividirá en 200 roscas que se llevarán a casas hogar, asilos, y sitios que atienden a personas de la tercera edad y a otros lugares de esa naturaleza, como los hospitales; a los médicos y enfermeras del Hospital Central y de la Clínica 50 del IMSS, a cuyo personal a veces olvidamos, además de las delegaciones municipales”, comentó el alcalde Enrique Galindo Ceballos.
El presidente municipal de San Luis Potosí también citó que la repartición de la rosca será gestionada por el Ayuntamiento, pero en nombre de las panificadoras que patrocinaron su elaboración, con la ventaja de ayudar a personas que viven situaciones complejas en esta época del año.
“Las fiestas decembrinas se disfrutaron en una ciudad alegre y abierta con el semáforo en verde, que ojalá y así siga, pero está en el escenario la posibilidad de que cambie de color. Por eso tenemos que cuidarnos al máximo”, enfatizó el alcalde.
El mandatario agradeció a las empresas panificadoras que patrocinan la elaboración de las Roscas de Reyes que se donarán a asilos, casas hogar y hospitales, entre otros sitios: Panadería La Superior, Del Real, Penny, Sabropan, Juli, El Nopal, Marsella, República, Guadalupana, La Perla, San Ángel y Alpan; además del Instituto de Gastronomía Isima