Otros seis no figuran en los registros de los más buscados por las autoridades mexicanas.
Agencias
CIUDAD DE MÉXICO.- Luego de la extradición de Joaquín El Chapo Guzmán a Estados Unidos, la DEA mantiene como blancos prioritarios a ocho líderes mexicanos del narcotráfico, cuya persecución heredó la administración de Barack Obama al gobierno de Donald Trump.
El listado incluye seis capos de cuatro cárteles que no figuran en las secciones públicas de los más buscados por el gobierno de México, a través de la Procuraduría General de la República (PGR), ni en el programa de recompensas.
Los cabecillas identificados por la DEA son Ismael ‘El Mayo’ Zambada y Dámaso López Núñez, ‘El Licenciado’, jefes máximos del cártel de Sinaloa tras la caída de Guzmán, según el reporte Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2016.
Además de Nemesio Oseguera, El Mencho, y Jorge Luis Mendoza Cárdenas, ‘La Garra’, dirigentes del cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
También figuran en la lista de la agencia antidrogas estadounidense Carlos Arturo Quintana, ‘El 80’, y Julio César Olivas Torres, ‘El Sexto’, líderes del cártel de Juárez.
En tanto que los dirigentes del cártel del Golfo son José Antonio Romo López, ‘Don Chucho’, y Petronio Moreno Flores, ‘Panilo’.
Rápida expansión
El informe, elaborado en noviembre de 2016, revela que los cárteles mexicanos siguen siendo la mayor amenaza criminal contra Estados Unidos, uno de los preceptos que ha manejado en sus discursos Donald Trump, quien deberá definir la continuidad de la política antidrogas de su país.
Excepto ‘El Mayo’ y ‘El Mencho’, el resto de los líderes de los cárteles mexicanos más buscados por la DEA no aparecen entre los registros públicos de los más buscados por la PGR, de acuerdo con una revisión de Milenio.
El gobierno federal ofrece por Zambada hasta 30 millones de pesos a quien proporcione datos para su localización y captura (Acuerdo A/123/09).
Sin embargo, por Oseguera solo promete el pago de hasta dos millones de pesos (Acuerdo A/102/2011).
La gratificación es menor si se toma en cuenta que el Departamento de Justicia de Estados Unidos lo perfila entre los principales capos del narcotráfico y en México se le ubica como jefe del cártel que derribó con lanzacohetes en Jalisco un helicóptero de la Fuerza Aérea Mexicana el 1 de mayo de 2015.
Para la agencia antidrogas estadounidense, el CJNG es una organización criminal de reciente creación (2010), aunque es uno de los más poderosos y de rápida expansión.
El informe de la DEA señala que el cártel de Sinaloa, aun con la captura y extradición de ‘El Chapo’, continúa dominando el mercado negro estadunidense de las drogas, en alianza con bandas y pandillas, sobre todo en el oeste de EU.
En este documento no aparece el narcotraficante Rafael Caro Quintero, aun cuando la agencia antidrogas mantiene vigente una recompensa de cinco millones de dólares por él.
La razón es que no está identificado como uno de los líderes actuales del narco y el gobierno estadunidense lo busca por el asesinato del ex agente de la DEA Enrique ‘Kiki’ Camarena, quien fue ejecutado por orden de los líderes del desaparecido cártel de Guadalajara, que dio origen al cártel de Sinaloa.
Otros extraditados
Desde 2006, el gobierno mexicano ha entregado a las autoridades de EU al menos a 13 líderes de grupos dedicados al narcotráfico.
Entre ellos se encuentran los hermanos Benjamín y Rafael Arellano Félix, Héctor Luis ‘El Güero’ Palma, así como Osiel Cárdenas Guillén.
También están Sandra Ávila Beltrán, ‘La Reina del Pacífico’, y la única mujer en esta lista, así como Édgar Valdez Villarreal, ‘La Barbie’.