Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, quien en el 2016 fue el secretario general del CEN del PRI,  presuntamente operó el desvió de 250 millones de pesos que probablemente se utilizaron para financiar ilegalmente las campañas políticas en las que el PRI contendió bajo la dirección del entonces Presidente del CEN del PRI Manlio Fabio Beltrones.

En política no hay casualidades, todo pasa por algo. Alejandro Gutiérrez Gutiérrez fue la mano derecha de Manlio Fabio Beltrones durante su estancia en la dirigencia del Partido Revolucionario Institucional. La cercanía de Alejandro con Manlio Fabio Beltrones le valió para ser considerado como uno de los candidatos más fuertes para contender por la gobernatura de Coahuila.

La primer gran batalla entre Peña y Manlio tuvo lugar durante el último consejo del PRI, en el que se discutía la posibilidad de remover el candado de la militancia como un requisito para poder contender como candidato a la presidencia por dicho partido. Durante el consejo solo dos personas figuraban como los líderes absolutos: Manlio Fabio Beltrones y Enrique Peña Nieto. Te alienabas con Peña o te alineabas con Manlio. Se respiraba un aire de hostilidad en el consejo en el que se habría de tomar una decisión que moldearía el camino a José Antonio Meade hacia a la candidatura a la presidencia por el Revolucionario Institucional. Al final del camino, Enrique Peña Nieto fue el gran vencedor y los estatutos del PRI fueron modificados. Manlio Fabio, uno de los últimos grandes institucionales de su partido, perdió y no apoyó la decisión de permitir que un personaje no militante, que ha trabajado con presidentes panistas, haya sido elegido el abanderado del PRI.

Manlio Fabio Beltrones tiene una gran trayectoria en el Partido de la Revolución Institucional en la que ha sido gobernador de su estado, diputado local, diputado federal y hasta presidente del PRI nacional. Durante el sexenio de Enrique Peña Nieto su inconformidad y distanciamiento de las decisiones que se han tomado al interior del PRI ha sido evidente. Inclusive se ha rumorado que ha cabildeado con otros personajes también inconformes con la manera en la que se han renunciado a las viejas tradiciones del PRI, para formar una corriente alterna dentro del propio PRI que les permita tener un mayor grado de control al interior del propio partido y salvaguardar la manera institucional que es un distintivo del propio PRI.

Es difícil creer que una decisión como la de detener a un ex secretario general del CEN del PRI no haya sido evaluada y aprobada por Los Pinos. Es difícil creer que haya sido mera casualidad su detención, cuando Alejandro era la mano derecha de uno de los más férreos opositores a la candidatura de José Antonio Meade. Lo que es más difícil de creer es que esta detención no sea un ataque directo fraguado por José Antonio Meade, apoyado por Los Pinos, para de una vez controlar a Manlio Fabio Beltrones previo a la contienda electoral que inicia el año entrante.

POR https://politicinsider.wordpress.com/