Esteban Espinoza / Rioverde SLP
El ex presidente de la Camara nacional de Comercio de Rioverde, Alberto Tenorio, conspiró que la falta de orden en la administración pública local, específicamente en el manejo de espacios públicos durante eventos y ferias, que debería ser un lugar limpio y agradable para los visitantes, se ha convertido en un tianguis desordenado y sucio, debido a que el encargado de estos eventos prioriza intereses personales sobre el bienestar de la ciudadanía.
Alberto Tenorio consideró ademas que el Comercio local enfrenta grandes retos ante la competencia desleal y los cambios en los hábitos de consumo, particularmente durante temporadas como el Buen Fin.
Tenorio señaló que durante el Buen Fin, los consumidores tienden a enfocar sus compras en las grandes cadenas de autoservicio y mayoristas, principalmente en productos electrónicos, lo que deja en desventaja al pequeño comercio local. “El comercio minorista vende poco en esta temporada; aunque hay quienes buscan descuentos que podemos ofrecer, la mayoría opta por las grandes tiendas”, comentó.
Además, indicó que noviembre suele ser un mes complicado para el comercio en Rioverde, debido a factores como la feria, el frío y el impacto de pagos acumulados. “Noviembre siempre ha sido flojo, y diciembre, aunque esperamos mejores ventas, tampoco alcanza los niveles de años pasados”, agregó.
Respecto a la competencia con productos chinos y las tiendas en línea internacionales, Tenorio destacó que estas han afectado severamente a sectores como las boutiques y otros comercios tradicionales. Sin embargo, aplaudió la implementación de un nuevo plan de ingresos del gobierno federal, que impondrá un impuesto del 16% a las compras realizadas a tiendas chinas, buscando equilibrar las condiciones con el comercio local. “Antes, los productos chinos no pagaban nada y eso era una competencia desleal; esta medida es una oportunidad para recuperar terreno”, señaló.
Finalmente, Tenorio expresó su esperanza de que las ventas de fin de año puedan mejorar para los comercios locales, aunque reconoció que ya no se alcanzan los niveles de consumo de décadas pasadas. También lamentó el impacto que tiene el regreso de paisanos con mercancías adquiridas en el extranjero, lo que reduce significativamente el flujo de gasto en la región.