Esteban Espinoza / San Luis Potosí
San Luis Potosí enfrenta una preocupante realidad en el marco del Día Internacional de la Mujer: la violencia, la discriminación y el desdén normativo siguen siendo una constante para las potosinas. Datos oficiales reflejan que la inseguridad que enfrentan las mujeres, particularmente dentro de sus propios hogares, continúa siendo alarmante.
De acuerdo con la Secretaría de Salud del Gobierno Federal, el 92% de las víctimas de violencia intrafamiliar en 2024 han sido mujeres. De los 359 casos registrados en San Luis Potosí, 331 corresponden a mujeres, lo que evidencia la vulnerabilidad en la que se encuentran dentro de su entorno familiar.
El Sistema Nacional de Seguridad Pública también reportó cifras inquietantes: en 2023 se registraron nueve mil 562 denuncias por violencia familiar en el estado, mientras que la misma dependencia documentó doce feminicidios en el mismo periodo.
Por otro lado, el Congreso del Estado mantiene un rezago en la legislación que protege a las mujeres. Aunque la violencia vicaria fue reconocida en 2022, hasta la fecha no ha sido tipificada como delito en el Código Penal, dejando en el limbo legal a muchas víctimas de este tipo de agresión.
Asimismo, los legisladores han evitado aprobar un punto de acuerdo para garantizar condiciones dignas y seguras a las mujeres privadas de la libertad que fueron trasladadas desde el penal de La Pila al Centro de Reinserción Social de Xolol, en el municipio de Tancanhuitz.
La titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) de San Luis Potosí, María Manuela García Cázares, informó que en lo que va del año 2025 se han registrado dos feminicidios y una muerte violenta de mujer en la entidad.
Estas declaraciones se dieron en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo.
En este 8M, las mujeres potosinas no solo exigen igualdad y respeto, sino también justicia y seguridad ante un sistema que, hasta ahora, sigue sin responder a sus demandas.
