Ante la nominación de Enrique Ochoa como candidato a dirigir el PRI, algunos priistas han demostrado su descontento con la decisión.
Agencias
CIUDAD DE MEXICO.- La nominación de Enrique Ochoa, un joven tecnócrata cercano al presidente de México, Enrique Peña, como candidato a dirigir al partido gobernante desató una pequeña “rebelión en la granja” en una organización donde usualmente se acatan este tipo de decisiones.
De acuerdo con el sitio web ansa.it, el ex gobernador del estado sureño de Oaxaca, Ulises Ruiz, a quien se considera un exponente del ala más tradicional y conservadora del Partido Revolucionario Institucional (PRI), criticó las “formas arcaicas” con las que se pretende dar el relevo en estas formación, fundada en 1929.
“Con sorpresa que raya en la indignación, los priístas estamos siendo testigos de cómo, una vez más, se secuestran las decisiones más importantes para el partido”, señaló en una carta difundida el sábado.
“La reducida cúpula, encumbrada por la militancia, no es capaz de voltear hacia ella para permitirle expresar libre y abiertamente su opinión”, agregó.
Otro personaje que rechazó la propuesta de Ochoa, 43 años, ex director del ente estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE), y con un doctorado por la Universidad de Columbia, Estados Unidos, fue el ex diputado federal Hugo Díaz-Thomé, quien solicitó su registro para el mismo cargo.
Si no es aceptada una segunda candidatura, se espera que la la Comisión Nacional de Procesos Internos del PRI emita un dictamen para declarar electo a Ochoa y el próximo martes próximo se reúna el Consejo Político Nacional para ungir a Ochoa como nuevo dirigente.
Beltrones renunció el pasado 20 de junio tras la derrota del PRI en las pasadas elecciones de hace un mes, la peor desde el 2000, al perder 7 de 12 gobernaciones en disputa ante el conservador Partido Acción Nacional (PAN).