De acuerdo con información  de 2015 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) a la que se le aplicó la metodología empleada por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en cinco estados se registraron niveles de pobreza superiores a 50% de cada una de su población.

Excélsior dio cuenta ayer que, con base en dicha información estadística y metodológica de los organismos autónomo y descentralizado, respectivamente, la proporción de mexicanos en situación de pobreza multidimensional fue de 36.7% en 2015.

La población que vive en condiciones de pobreza, en su medición multidimensional,  es aquélla que se sostiene con un ingreso inferior a la línea de bienestar económica y al menos tiene una carencia social.

El cálculo realizado por este diario da cuenta que Chiapas tiene 65.5% de su población en situación de pobreza, Oaxaca 59.7% de su población, Guerrero 59.3%, Veracruz 50.7% y Puebla 50.1 por ciento.

Esos cinco estados suman 15 millones 180 mil 607 personas en condición de pobreza, equivalente a 34% del total de la población pobre que hubo en el país en 2015, que fue de 44.5 millones  de personas.

En términos absolutos, el Estado de México, con 6.9 millones de personas; Veracruz, con 4.1 millones; Chiapas, con 3.4 millones; Puebla, con 3.1 millones, y Oaxaca, con 2.4 millones son las entidades con mayor número de pobres en México.

CINCO ENTIDADES, CON MÁS POBREZA

Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Veracruz y Puebla son las únicas entidades federativas que tienen a más de la mitad de su población en condición de pobreza, de acuerdo con datos del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) analizados por Excélsior usando el programa de cálculo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

Así, Chiapas tiene a 65.5% de su población en situación de pobreza, Oaxaca a 59.7% de su población, Guerrero está en el listado con 59.3%, Veracruz con 50.7% y Puebla tiene 50.1%.

Estas cinco entidades suman 15 millones 180 mil 607 personas en condición de pobreza, equivalente al 34% del total de la población pobre que hubo en el país en 2015, es decir 44 millones 533 mil 273 personas.

Cabe recordar que este diario calculó que a partir de datos del Módulo 2015, en México 36.7% de la población vive en condiciones de pobreza en su medición multidimensional, es decir que se sostienen con un ingreso inferior a la línea de bienestar económico y tienen al menos una carencia social.

De este conjunto de personas, siete millones 96 mil habitantes, es decir 5.8% de la población, vive en pobreza extrema, lo que implica que tienen un ingreso inferior al costo de la canasta alimentaria y tienen al menos tres carencias sociales.

En términos absolutos los estados con más población en pobreza general son: el Estado de México, con 6.9 millones; Veracruz, con 4.1 millones; Chiapas, 3.4 millones; Puebla, con 3.1 millones y Oaxaca, con 2.4 millones, de acuerdo con el Módulo de Condiciones  Socioeconómicas 2015 elaborado por el Inegi.

POLÍTICA SOCIAL, SIN MEDICIÓN 

La reducción estadística de la pobreza entre 2014 y 2015 no puede atribuirse a un beneficio concreto de la política social, puesto que las modificaciones que hizo el Inegi al medir el ingreso de los hogares impiden comparar los resultados respecto a otros años, opinaron especialistas consultados por Excélsior.

Rodolfo de la Torre, director del Programa de Desarrollo Social con Equidad del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), dijo que “al no haber comparabilidad, con cualquier cifra que tengamos para 2015 no se va a poder afirmar que la pobreza bajó o creció, y el gobierno no podrá  evaluar con seguridad cuál es el efecto de las políticas públicas”.

Miguel del Castillo Negrete, profesor-investigador del Departamento de Estudios Generales del Instituto Tecnológico Autónomo de México, manifestó que mientras el Inegi no transparente la forma en que captó los ingresos, los resultados de la pobreza 2015 habrá que tomarlos con mucho cuidado, porque sería un cambio estadístico “que no sabemos qué parte atribuirla a la política social, o qué parte adjudicarla a la eliminación de los ingresos sospechosamente bajos, como lo mencionó el presidente del Inegi”.

 

PIDE IP PONER FIN A DIFERENDO CON INEGI

El diferendo entre el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) por el cambio a la metodología del Módulo de Condiciones Socioeconómicas en 2015  para medir la pobreza debe ser solucionado, indicó el sector privado.

El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón, expuso que el diferendo es de carácter técnico, por lo que “puede y debe solucionarse, con total transparencia. Si el termómetro no registra adecuadamente la realidad de la temperatura, jamás podremos recetar las medicinas adecuadas”.

En su mensaje semanal, explicó que este instrumento es uno de los insumos básicos que utiliza el Coneval para la medición de la pobreza desde la perspectiva multidimensional.

“Es fundamental aclarar y resolver este debate, no sólo para encontrar algún mecanismo que le dé continuidad a la serie, sino para salvaguardar la credibilidad de ambas instituciones y de sus indicadores, la cual han ganado ya con muchos años de profesionalismo y exactitud en su trabajo”, sostuvo.

Refirió que, al margen del contar con mediciones precisas la pobreza es un reto de enormes proporciones, por lo que es importante fortalecer cuatro áreas críticas para abatirla; así, es necesario más empleo, que sólo se genera a partir de inversión y crecimiento, sostenido e incluyente, así como una política social más efectiva.

Además, educación de calidad que permita la movilidad social, y el fortalecimiento del Estado de derecho.

A cuentas

En tanto, el vocero del PRD en la Cámara de Diputados, Javier Nava Palacios, calificó como un hecho la comparecencia de los titulares del Inegi y del Coneval ante el poder legislativo y afirmó que “el PRD se encuentra sorprendido respecto de los datos que recién se difundieron sobre la sensible disminución de 10 por ciento de la pobreza en el país en tan sólo un año, lo cual pareció ser casi un decreto.”