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MÉRIDA, Yuc.- La Secretaría de Seguridad Pública “cerró” la frontera de Yucatán con Quintana Roo e instaló puestos de control y revisión, como medida preventiva por la balacera en un antro de Playa del Carmen, hecho ocurrido en la madrugada de este lunes en el que murieron seis personas y hubo varios heridos.

Autoridades consideran a los autores son considerados de alta peligrosidad.

Tras la balacera en la discoteca Blue Parrot en Playa del Carmen, en la Riviera Maya, de acuerdo con el fiscal general de esa entidad, Miguel Angel Pech Cen, murieron cinco personas, dos de ellas personal a cargo de la seguridad del evento BPM Festival; una mujer que sufrió una dislocación al parecer provocada por una estampida; un asistente al evento y una persona más que falleció en la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social de esa población.

Dos de las personas fallecidas eran de nacionalidad canadiense, dos italianas y, al parecer, un colombiano. En total fueron 15 personas lesionadas, seis se encuentran en el Hospital General, siete en la clínica de Playamed y dos en el hospital del IMSS. Cinco de estas personas ya fueron dadas de alta.

Efecto ‘cucharacha’

Ante estos hechos, la SSP “cerró” la frontera de Yucatán con Quintana Roo e instaló puestos de control y revisión, como medida preventiva del efecto “cucaracha”, pues los primeros reportes señalan que los autores son considerados de alta peligrosidad.

Se instalaron puestos de control en la entrada a Mérida, en los accesos a Yucatán desde Quintana Roo, la autopista y la carretera libre a Cancún y en la de Campeche. Incluso hay más puestos de control en el periférico de Mérida. Se detiene a los vehículos en los que hay más de dos ocupantes y que tienen matrícula foránea.

De acuerdo con la información proporcionada, los policías recibieron indicaciones de revisar exhaustivamente los automotores, debido a que tras el ataque a la discoteca, los delincuentes pudieron haber huido hacia Yucatán.