Desde sus estudios en los Emiratos Árabes, y hasta quién fue la persona que la presentó con el hijo de AMLO, el periodista reveló múltiples datos sobre la nuera de AMLO
Luego de dar a conocer la presunta vida llena de lujos de José Ramón López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador y su esposa, Carolyn Adams, trabajadora en el sector energético, mucho se ha hablado sobre la vida que ostenta ésta última desde hace algunos años.
De acuerdo con la propia Carolyn Adams, estudió en la ciudad de San Diego, Estados Unidos, donde obtuvo la denominada Beca Bill Clinton (The William Jefferson Clinton Scholarship), gracias a la que viajó para realizar sus prácticas profesionales en Los Emiratos Árabes Unidos.
Una vez instalada en Dubái, comenzó a trabajar en el sector energético y, de acuerdo con el comunicado que lanzó en las redes sociales, también fue empleada de la familia Real de Emiratos, sin especificar las actividades que entonces desempeñadas.
Sobre esto, el periodista reveló que personas cercanas a la empresaria le aseguraron que fue Jordy Herrera, secretario de Energía en el sexenio de Felipe Calderón, uno de los más férreos opositores de AMLO, quien la habría ayudado a conseguir dicha fecha, aunque acotó que el propio Herrera se lo desmintió.
En esa época habría conocido a Carlos Álvarez, quien tiene entre sus empresas una petrolera de nombre Cava Energy, donde más tarde trabajó Carolyn Adams en el estado de Nuevo León. Con base en testimonios de gente cercana, apuntó Riva Palacio que “la señora Adams comenzó a apoyar las gestiones de Álvarez para obtener contratos con Pemex, aprovechando la reforma energética de Peña Nieto. Para hacerlo, recurrió a Arturo Henríquez Autrey”.
Éste último fue nombrado por Emilio Lozoya, entonces director general de Pemex, como quien encabezaría el área de Procura y Abastecimiento; sin embargo, fue investigado en 2015 por presunta corrupción y Emilio Lozoya continúa en prisión a la espera de resolver el caso Odebrecht.
Luego se trasladó a Nueva York, La Gran Manzana, para trabajar en la Organización de las Naciones Unidas, y más tarde llegó a la Ciudad de México, donde finalmente conoció a José Ramón López Beltrán y se casaron.
Riva Palacio aseguró que personas cercanas a Adams revelaron que Erik Legorreta, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Petrolera fue quien los presentó, mismo sujeto que fue blanco de una investigación por fraude de 60 millones a Pemex.
Al no prosperar sus negocios por la razón antes descrita, tuvo algunos problemas de trabajo y dinero, por lo que Eduardo Arratia, empresario y fundador de la empresa energética SCAP, la habría ayudado a salir adelante con el préstamo de una casa en Las Lomas.
Incluso a su llegada a Houston, vivió en casa de la misma persona, y antes de mudarse con el hijo del presidente de México, todavía era la inquilina de una casa de Arriata en Wheatstone, advirtió el columnista. Ahora, renta la famosa “casa gris” con alberca y sala de cine propia.
Es por lo anterior, que el periodista consideró que Adams es todo lo contrario a los principios de la Austeridad Republicana que predica el presidente Andrés Manuel López Obrador, e incluso la denominó como “lo que políticamente odia el presidente”, aunque aceptó que no se ha podido probar que haya delitos o conflicto de interés por parte de Adams.
“Lo único concreto que hasta ahora ha provocado la “casa gris”, es que el discurso de López Obrador se atasque cuando llega al despacho presidencial”, concluyó Riva Palacio.
Sin embargo, la ostentosa vida que presume Carolyn Adams en las redes sociales, parece no afectar al presidente de México. Durante su conferencia de prensa en Palacio Nacional. Aseguró que en el matrimonio de su hijo “es complicado meterse”, y continuó “porque al parecer la señora tiene dinero, y no tiene nada que ver con el gobierno”.