Esteban Espinoza / San Luis Potosí
Este 7 de junio, mientras México conmemora el Día de la Libertad de Expresión, San Luis Potosí enfrenta una dura realidad: se encuentra entre los diez estados con más agresiones contra periodistas, según datos recientes de la organización internacional Artículo 19.
A través de su informe “BARRERAS: desafíos para la libertad de expresión y el acceso a la información”, la organización reveló que durante el año 2024 se registraron 639 agresiones a comunicadores en todo el país, de las cuales 27 ocurrieron en territorio potosino, ubicando al estado en el séptimo lugar nacional por este tipo de violencia.
El documento enfatiza que la violencia contra la prensa es una constante en todo el país, ya que al menos una agresión fue documentada en cada estado. Sin embargo, Artículo 19 advierte que un bajo número de reportes no debe interpretarse como un ambiente seguro, sino como un posible reflejo de miedo, censura y autocensura por parte de los comunicadores.
En el caso particular de San Luis Potosí, el informe destaca un hecho alarmante: cinco voceadores fueron privados ilegalmente de su libertad en el estado, lo que representa uno de los casos más graves registrados.
Además, se advierte que las agresiones digitales continúan al alza, con 140 casos registrados a nivel nacional. Esta modalidad representa un nuevo campo de amenaza para el ejercicio periodístico, sobre todo en redes sociales y plataformas de comunicación.
Artículo 19 detalla que casi la mitad de las agresiones provienen de autoridades públicas: de las 639 agresiones, 287 fueron cometidas por el Estado mexicano, involucrando a funcionarios de los tres niveles de gobierno, así como a fuerzas de seguridad civiles y armadas.
Esto significa que casi 45% de los ataques a la prensa tienen su origen en instituciones públicas, lo que representa una grave contradicción con el deber del Estado de garantizar y proteger el ejercicio libre del periodismo.
Entre las principales formas de violencia reportadas se encuentran:
- Intimidación y hostigamiento
- Amenazas directas
- Bloqueo o alteración de contenido
- Uso indebido del poder público
- Agresiones físicas
- Privaciones de la libertad
Estas agresiones afectan tanto a periodistas individuales como a medios de comunicación en su conjunto, y ponen en riesgo el derecho ciudadano a estar informado.
En un contexto donde la información libre es clave para la democracia, esta fecha cobra un nuevo significado. El Día de la Libertad de Expresión no puede ser solo conmemorativo, sino también un llamado urgente a frenar la violencia contra quienes ejercen el periodismo.