The NYT News service
Las caretas que las personas utilizan contra el nuevo coronavirus no brindan una protección completa si no se acompañan de una mascarilla, reiteraron investigadores en Japón.
El equipo del Centro Riken de Ciencias Computacionales, un instituto de investigación con sede en Kobe, Japón, señaló que las caretas son útiles para proteger a quien las usa de las gotas de saliva de otras personas, pero no impiden que las suyas se propaguen hacia alguien más.
Para el estudio, los investigadores modelaron la difusión de aerosoles respiratorios en la supercomputadora más rápida del mundo, y comprobaron que los protectores faciales de plástico hacen poco para contener la propagación de partículas microscópicas en el aire creadas por actividades como hablar, cantar o estornudar.
Las caretas no hacen casi nada para detener la propagación de gotitas microscópicas en el aire que se consideran cada vez más como un vector importante para la propagación de la enfermedad, apuntaron.
Los protectores faciales pueden ser útiles para proteger al usuario de las gotas generadas por otros, pero son casi completamente ineficaces para proteger a otros de las propias gotas del usuario, según Makoto Tsubokura, profesor de la Universidad de Kobe e investigador principal de un equipo que está utilizando la supercomputadora líder mundial de Japón para comprender mejor cómo defenderse del coronavirus.
Si bien las caretas pueden bloquear la propagación de algunas gotas grandes, son esencialmente incapaces de capturar gotas de cinco micrones o menos, según las simulaciones que los investigadores realizaron en Fugaku, la supercomputadora japonesa considerada actualmente la más rápida del mundo.
Japón fue uno de los primeros países en aprender que las pequeñas partículas en el aire eran uno de los métodos más probables de transmisión del virus, que ha matado a casi un millón de personas en todo el mundo. El país promovió las mascarillas como primera línea de defensa contra el virus.
Desde los primeros días de la pandemia, los expertos en salud en Japón han advertido a las personas que eviten espacios cerrados, lugares abarrotados y contacto cercano que se cree que aumentan el riesgo de exposición al coronavirus.
La simulación realizada por investigadores de Riken demostró que las mascarillas, ya sean fabricadas o hechas a mano, son mucho más efectivas para bloquear la difusión de las gotas en el aire que las caretas.