PUERTO PEÑASCO, SON..- El desierto sonorense fue convertido en la fosa ilegal más grande de la entidad.
A la vera de la carretera que lleva de Puerto Peñasco a Caborca fueron encontradas piezas óseas que corresponderían a 44 cadáveres.
En esta ocasión, el hallazgo es mérito del colectivo de Madres Buscadoras de Hermosillo cuyas integrantes se colocaron palas y varillas al hombro para apoyar al grupo de Puerto Peñasco e internarse en el indómito desierto de Altar durante tres días.
El primer día, el miércoles 23, al final de una laguna de oxidación encontraron cuatro “tesoros”, como ellas llaman a los restos encontrados porque representan el regalo del consuelo para las angustiadas buscadoras y sus familias.
Para el jueves 24, en las inmediaciones del camino a La Ostionera 2, donde existen cooperativas de mujeres para la colecta de moluscos, hallaron 13 cadáveres más. Y ya el viernes 25, encontraron otros 25 cuerpos  parasumar 42.
Este vertedero desértico de cadáveres tuvo su auge una década atrás, cuando los grupos delictivos locales empezaron a utilizar estos parajes para descargar los cuerpos de personas abatidas en las interminables disputas por el territorio, las rutas del contrabando de drogas y de personas que se dirigen a EU.
Las buscadoras encontraron restos que llevan ya tiempo en la zona, así otros aún en descomposición.
La FGE confirmó la noche del sábado que había identificado 42 cadáveres, entre los cuales, presumiblemente, se hallaron los restos de cuatro mujeres.
La lejanía, el árido desierto y las interminables jornadas que iniciaban a primera hora y concluían con la caída del sol determinaron la estrategia y el patrón de búsqueda.
Sonora se ubica en el 4° lugar nacional entre los Estados con mayor número de fosas clandestinas y restos encontrados en ellas debido a que en el periodo comprendido del 1 de diciembre de 2018 al 14 de agosto de 2019 se ubicaron 41 fosas y se hallaron 65 osamentas.